El Coordinador Nacional del Movimiento Penitenciario de Voluntad Popular, Vladimir Ramírez, hizo un llamado a los organismos competentes y a la comunidad internacional debido a las graves violaciones de Derechos Humanos que viven los privados de libertad de la cárcel Yare III, en los Valles del Tuy, al presentarse presuntamente focos de COVID-19 lo cual pone en riesgo la vida de los detenidos quienes no cuentan con atención médica.
“A los privados de libertad no se les está permitiendo el ingreso de los alimentos ni medicamentos por parte de sus familiares, agravando así la grave situación de hacinamiento presentada en dicho centro por las reiteradas violaciones del debido proceso al suspender las audiencias preliminares y de juicio. Es por ello que los privados de libertad se encuentran en una huelga pacífica solicitando apoyo de los órganos competentes y que se les respete el derecho a la vida”.
El Abogado y consultor Jurídico nacional penitenciario de VP, Harold Guerrero, indicó que están en espera de la activación del sistema de justicia en Venezuela el cual ya poseía retardo procesal y que ahora se ha agravado con la pandemia, lo que ha generado más hacinamiento en los recintos penitenciarios a nivel nacional. «No basta que solo se hagan jornadas para descongestionar algunos centros de reclusión, hace falta la activación de todo el sistema de justicia en el país para solventar esa importante situación».
Guerrero hizo un llamado a liberar responsablemente a reclusos y otorgarles medidas humanitarias, con la intervención de la iglesia. Por ser vulnerables al COVID19 los mayores de 60 años, los que hayan cumplido las 3/4 partes de la pena y quienes padezcan enfermedades infecciosas crónicas deben recibir este beneficio.
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