Representantes de los gremios de industria y comercio del Táchira coinciden en que a medida que pasan los meses aumenta el número de industrias y negocios que van bajando las «santamarías» y que no vislumbran un cambio a corto o largo plazo.
Nelson Altuve P | La Prensa de Táchira
Confiesan que sostener una fábrica industrial o un comercio es una carga muy pesada en estos tiempos que vive Venezuela. Porque sin materia prima, vulnerabilidad financiera, trabas burocráticas, sin poder de asociación, con puentes y fronteras cerradas, falta de transporte y combustible, fallas en los suministros, cero activación de las variables productivas, configura un cuadro tétrico que deja el «juego trancado» como en el dominó.
Esa coincidencia también se da en los datos que manejan, porque más allá del tema cuantitativo está el aspecto cualitativo, es decir, que concuerdan en los efectos por los que se cierran a diario plazas industriales y locales comerciales.
Pietro Cennicola, presidente de la Asociación de Comerciantes del Táchira, asegura que el mejor ejemplo es que solo resta pasar por zonas como Barrio Obrero o el centro de la capital, donde hay muchos locales y oficinas cerradas, y que nada tiene que ver con la cuarentena sino con la crisis socio-económica que vive todo el país.
Los últimos informes que nos llegaron desde Consecomercio es que hay una paralización total que está llegando al 70%, es decir por cada 100 negocios hay apenas 30 abiertos, mientras que en la industria la paralisis sube a un 85%» dice Cennicola
Comenta que las inversiones en negocios han caído producto de la situación y agravada por la pandemia, ocasionando pérdidas enormes a los inversionistas que ya no pueden rentar sus locales, esto ocasiona que tampoco se genera movimiento económico por lo que ese dinero no entra a la economía.
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