Venezuela suma un problema más a su lista: la posibilidad que transportistas de personas y alimentos se paralicen por falta de gasoil. Según explicaron miembros del sindicato de PDVSA a ADN Cuba, la escasez del combustible se debe a la insuficiente producción que existe en las refinerías petroleras, y que, un 40% de lo que se produce se lleva a Cuba.
Miami Mundo / adncuba
De acuerdo con Iván Freites, integrante del sindicato de trabajadores de Pdvsa, y quien dejó al país luego de denunciar acoso político en su contra, la situación del gasoil en Venezuela, cada día que pasa, se encuentra peor. “En general toda la industria petrolera nacional está decaída. La refinería Cardón, del Complejo Refinador de Paraguaná estado Falcón, y El Palito en Puerto Cabello estado Carabobo, son las únicas dos plantas de las cinco que existen en el país que operan al mínimo de su capacidad instalada”, indicó el sindicalista.
Según Freites, un ejemplo de lo débil que está la producción de gasoil en Venezuela es si se compara la relación producción- consumo con el 2010. “Hace 10 años el consumo en el país era de 210 mil barriles por día de diesel y la producción estaba por el orden de 250 a 270 mil barriles de diesel. En enero de 2021 la producción diariamente ha sido de 40 mil barriles; sin embargo, esta cifra ha sido zigzagueante debido a la condición de las refinerías, pues, para nadie es un secreto, que funcionan 5 días y se paran 10. Esta producción diaria logra un estimado de 1.200.000 barriles de gasoil al mes, pero de ellos se envían a Cuba 500 mil, o sea más de 41% de la producción”, señaló.
Comerciantes de verduras amenazados por la escasez
Reynaldo, quien pide la omisión de su apellido por seguridad, es feriero, como en Venezuela se conoce a los comerciantes que traen frutas y verduras desde la región andina a Caracas. Vive en Táchira y desde hace siete meses empezó a sentir la escasez de gasoil pues no encontraba en el camino hacia a Caracas ninguna estación donde pudiera surtir de combustible.
El comerciante contó a ADN Cuba que, pese a la preocupación, cuando llegaba a Caracas, podía echar gasoil con normalidad por lo que empezó a traerse en cada viaje cuatro bidones de 20 litros para llenarlos del combustible, mientras sus trabajadores vendían verduras, y poder regresar al Táchira sin problemas.
Desde hace dos meses esta realidad cambió. Reynaldo ya ni en Caracas puede llenar su camión, tampoco los bidones que trae para luego regresar al estado Táchira. Desde que inició el 2021 su solución ha sido suministrarse en Tazón, una estación ubicada a pocos metros de Fuerte Tiuna, donde paga 10 dólares al bombero para que le permita surtirse y continuar en su negocio.
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