¿Por qué no hay elefantes del tamaño de hormigas, ni hormigas del tamaño de elefantes? ¿Por qué los perros más pequeños caminan más rápido que los grandes, o por qué el corazón de las criaturas más menudas late más rápido que el de las más voluminosas? Este tipo de preguntas tienen una explicación: la física impone unos límites a los animales. Por ejemplo, los pequeños pierden proporcionalmente más calor que los mayores (a causa de que su cuerpo tiene una mayor relación entre la superficie y el volumen) y suelen necesitar metabolismos más rápidos y alimentos más energéticos.
«Lo más importante es que hemos descubierto que la misma función de crecimiento se aplica a todos los seres vivos», ha explicado a ABC Ian Hatton, director de la investigación y científico en el Instituto de Ciencias y Tecnología Ambientales de la Universidad Autónoma de Barcelona. «Antes se pensaba que esta función de crecimiento se basa en la relación entre metabolismo y tamaño corporal. Pero ahora sugerimos una explicación más sencilla, según la cual el metabolismo se ajusta a una función de crecimiento universal». Esto sugiere la necesidad de replantearse la teoría metabólica de la ecología.
Para leer la nota completa pulsa AQUÍ
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.