Un nuevo caso de extorsión conmocionó a los habitantes de Cundinamarca, teniendo en cuenta que los involucrados son dos estudiantes. Uno de los adolescentes fue aprehendido en el municipio de Chía por exigir dinero a sus compañeros bajo la amenaza de asesinarlos, en dado caso de que no cumplieran con los pagos que se hacían de manera mensual.
Por Jenny Alejandra Bustos Granados / Infobae
De acuerdo con lo informado por las autoridades, el joven fue capturado en flagrancia mientras recibía una suma de dinero que, presuntamente, tendría vinculación con sus peticiones ilícitas hacia sus compañeros para que se salvaran de ser agredidos.
Ante esta situación, la Fiscalía General de la Nación dio a conocer que el menor había comenzado a enviar mensajes amenazantes a sus víctimas desde el 30 de mayo de 2024, en los que exigía el cumplimiento de los pagos para no cumplir sus amenazas.
El operativo que llevó a la captura del adolescente fue coordinado por el Gaula y el grupo de Infancia y Adolescencia de la Policía Nacional, pues se trata de un menor de edad y la ley debe garantizar sus derechos.
Denuncias de extorsión
La denuncia de una de las víctimas fue la que desató la investigación para dar con el agresor, debido a que uno de los jóvenes afectados contó que había estado pagando cuotas mensuales para proteger su vida, un hecho que fue clave para que las autoridades pudieran intervenir.
En cuanto al autor de las extorsiones, las autoridades confirmaron que fue presentado ante un juzgado penal municipal con función de control de garantías para adolescentes, donde el juez le imputó cargos por el delito de extorsión agravada.
Sin embargo, el joven negó su responsabilidad en los cargos de los que es acusado, por lo que las víctimas esperan que el caso no quede impune, teniendo en cuenta que se trata de un menor de edad, por lo que piden a la justicia que actúe.
Entre tanto, la Fiscalía explicó que el caso sigue el patrón de otros incidentes de extorsión en el país, por lo que los padres y la comunidad académica en general se encuentran en alerta ante la seguridad de sus hijos al interior de los planteles educativos.
Afortunadamente, en este caso, el menor fue grabado en video mientras recogía el dinero de sus víctimas, lo que facilitó su aprehensión. Tras la imputación de cargos, el juez ordenó su internamiento en un centro para menores de edad, medida que forma parte del proceso de judicialización que podría culminar en una condena por estos actos.
Este caso recuerda que el bullying puede ser llevado al extremo de la criminalidad, lo que afecta la tranquilidad de las víctimas, como ocurrió con los estudiantes en Chía. Entre tanto, se conoció que las autoridades continúan investigando para determinar si hay más involucrados en este caso de extorsión escolar o si el joven actuó solo.
A través de un estudio publicado en la Universidad del Rosario en abril de 2024, se confirmó que Colombia es el segundo país en donde existe mayor exposición al bullying entre los países latinoamericanos y el décimo entre los treinta países con mayor número de acoso escolar.
“Los niños que pertenecen a grupos minoritarios tienen mayor probabilidad de ser víctimas de matoneo, como tener una discapacidad física o cognitiva, pertenecer a grupos étnicos minoritarios o tener una expresión de género u orientación sexual diversa. El 82% de los niños con discapacidad son acosados en los colegios y 9 de cada 10 estudiantes son acosados por sus diversidades de género”, puntualizó el informe.
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