Los gobiernos de Alemania, Francia y Reino Unido condenaron hoy en un comunicado conjunto las recientes medidas de Irán, confirmadas por el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), para seguir ampliando su programa nuclear que, subrayaron, carece de «justificación civil creíble».
Calificaron de «especialmente preocupante» la decisión de Irán de ampliar la producción de uranio altamente enriquecido en la instalación subterránea de Fordow.
«La medida de Irán es un desafío al régimen global de no proliferación. Esta medida alberga considerables riesgos en lo que respecta a la proliferación y no tiene ninguna justificación civil creíble«, subrayaron.
Agregaron que «al aumentar su capacidad de producción en Fordow y Natanz, mucho más allá de los límites establecidos en el JCPoA, y al acelerar la producción de uranio enriquecido, Irán ha dado nuevos pasos significativos para socavar» este acuerdo de 2015, por el que Teherán se comprometió a reducir su programa nuclear a cambio del levantamiento de sanciones.
«La acción de Irán es aún más preocupante si se tiene en cuenta que hace cinco meses Irán suspendió la aplicación de todas las medidas de transparencia relacionadas con el JCPoA«, subrayaron.
Calificaron de «inaceptable» que Teherán presente esta «escalada» como una «reacción» a la adopción por parte de la Junta de Gobernadores del OIEA de una resolución que insta a Irán a cooperar en materia de salvaguardias.
«Irán está legalmente obligado, en virtud del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares, a aplicar plenamente su acuerdo de salvaguardias», señalaron.
Los gobiernos de Alemania, Francia y Reino Unido agregaron que seguirán consultando con sus socios internacionales sobre cómo enfrentar «esta escalada por parte de Irán». EFE
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