El papa Francisco recibió este lunes a Giuseppe Conte, presidente del Consejo de Ministros de Italia, con quien mantuvo una reunión en el Vaticano.
Por el momento, la Santa Sede no ha difundido detalles sobre el encuentro, ya que se trató de una audiencia privada y no como jefe de Estado. Según fuentes del gobierno italiano, el encuentro en el Palacio Apostólico Vaticano fue particularmente amigable.
El premier italiano estuvo acompañado por el embajador de Italia ante la Santa Sede, Pietro Sebastiani. La prensa italiana reportó que los líderes hablaron sobre la pandemia de coronavirus, que ya dejó más de 10.000 muertos y 10 mil contagiados en Italia. Por su parte, el Vaticano ha reportado seis casos, pero ninguno en el entorno cercano de Francisco.
Al final del encuentro, el premier le regaló a Francisco los tres volúmenes de una antigua edición de la “Divina Comedia” de Dante Alighieri, ilustrados y con el comentario de Niccolo Tommaseo.
Según ha escrito el diario «Il Messaggero», Jorge Bergoglio vive aislado en su residencia, la Casa Santa Marta, sin entrar en contacto con los otros huéspedes y sin bajar al comedor común, después de que se detectase un positivo de uno de los residentes, un funcionario de la Secretaría de Estado.
Pero sigue viendo a personas en reuniones individuales y en los últimos días también se reunió con la alcaldesa de Roma, Virginia Raggi.
El papa y Conte se habían reunido brevemente al final del funeral del cardenal Achille Silvestrini, el 30 de marzo del año pasado, pocos días antes de que naciese el segundo gobierno con él como primer ministro.
La primera audiencia oficial en el Vaticano tuvo lugar el año anterior, el 15 de diciembre de 2018, duró 45 minutos y se abordaron temas como las desigualdades sociales, la migración, el medio ambiente y la paz.
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La misa del Papa
En la eucaristía que celebra cada día en la capilla residencia de Casa Santa Marta, Francisco se refirió a todos los que viven con temor y asustados por la pandemia de COVID-19 y pidió oraciones para que el Señor los ayude a ponerse en pie “por el bien de toda la sociedad”.
“Oremos hoy por tantas personas que no logran reaccionar, que están asustadas por esta pandemia. Que el Señor les ayude a levantarse por el buen de toda la sociedad”, ha dicho el Papa en la misa sin fieles y retransmitida por streaming.
La homilía se centró en las dos mujeres protagonistas de las lecturas que estaban condenadas a muerte: la inocente Susana, acusada injustamente por jueces corruptos, y la mujer adúltera sorprendida ‘in fragranti’. “¿Qué hace el Señor con esta gente? Salva a la mujer inocente, le hace justicia. Perdona a la mujer pecadora. A los jueces corruptos los condena; a los hipócritas los ayuda a convertirse”, ha explicado.
Con información de EFE y Europa Press
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