El Tren de Aragua, la organización criminal más poderosa de Venezuela, no es tan conocida como la Mara Salvatrucha o los sanguinarios carteles del narcotráfico mexicano, pero su rápida expansión en relativo corto tiempo se ha convertido en una amenaza inclusive para Estados Unidos, donde ya hay algunas señales de su presencia y actividad.
Se calcula que esta banda cuenta con unos 2,700 miembros, entre personas y colaboradores. Más allá de Venezuela, opera delictivamente en Colombia, Perú, Chile, Brasil, Bolivia, Ecuador y Panamá, con «ramificaciones» en otros países.
En enero de este año, la policía del condado Miami-Dade en Florida detuvo a un presunto miembro de la banda criminal implicado en el secuestro, robo y asesinato de un hombre de origen venezolano, ocurrido en noviembre de 2023.
Ronna Rísquez, periodista venezolana y autora del libro ‘El Tren de Aragua’, afirma que la detención del sospechoso muestra la presencia de algunos miembros de la banda criminal en territorio estadounidense.
«Tuve la confirmación de un funcionario estadounidense de que efectivamente tienen identificados a varios miembros que están en Estados Unidos, lo que no estaba claro era si efectivamente el grupo tenía personas dispersas en en este país o si estas personas ya estaban operando de alguna manera en actividades similares a las que el grupo ha llevado a Chile, Perú Colombia y Venezuela», dijo Rísquez en una entrevista con el sitio web Runrunes.
Entre octubre de 2022 y octubre de 2033, la Patrulla Fronteriza detuvo en la frontera sur de Estados Unidos a 38 personas sospechosas de pertenecer a dicha banda, de acuerdo con un reporte de CNN. Al menos dos de esas personas están siendo procesadas por supuesta entrada ilegal al país.
Dónde comenzó a operar El Tren de Aragua
Varios reportes señalan que El Tren de Aragua se organizó entre 2012 y 2013 dentro del penal de Tocorón, una cárcel con sobrepoblación de reclusos en el estado de Aragua, en el centro norte de Venezuela, al que debe su nombre.
La banda operaba en Caracas y al menos otros cinco estados venezolanos: Carabobo, Sucre, Bolívar, Guárico y Lara.
Desde la cárcel de Tocorón, el grupo planificaba secuestros, robos, tráfico de drogas, prostitución y actividades de minería ilegal, de donde obtenía una parte de los ingresos con los que también logró mantener un sistema de corrupción con funcionarios de prisiones que le facilitaban las operaciones.
Al mismo tiempo estableció una «causa» o cuota de 15 dólares semanales que imponía a la población reclusa para el mantenimiento de toda una infraestructura dentro la cárcel, que contaba con piscina, bares, discoteca y hasta un zoológico.
“Preso que no pagaba ‘la causa’ (…) le daban un tiro en la muñeca , si no paga por segunda vez un tiro en el tobillo y la tercera falta de pago equivale a la pena de muerte”, contó a la orgnización OCCRP (Organized Crime and Corruption Reporting Project) Humberto Prado, coordinador general del Observatorio Venezolano de Prisiones, ente no gubernamental.
De la mano del Tren de Aragua, Tocorón se convirtió en un ejemplo de cárcel «autogestionada». Con los años, pasó a ser centro de operaciones del crimen internacional.
En septiembre de 2023, el gobierno venezolano ejecutó la Operación Liberación Cacique Guaicaipuro, en la que participaron 11,000 funcionarios del Ejército y policías para intervenir la prisión y detener al líder del Tren de Aragua, Héctor Guerrero Flores, alias ‘El Niño’, quien se fugó antes del operativo junto a otros 40 reclusos. Se desconoce su paradero.
En una rueda de prensa al concluir el operativo, el ministro venezolano de Interior, Remigio Ceballos, dijo que las autoridades incautaron fusiles de francotirador, granadas y lanzacohetes dentro de la cárcel de Tocorón.
Siga leyendo en Univisión
Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones descarga Telegram, ingresa al link https://t.me/albertorodnews y dale click a +Unirme.