Una publicación en Instagram a través de la cuenta @amigostrasplantadosdevenezuela con el mensaje “Pacientes trasplantados en peligro. Más de 3 meses sin recibir inmunosupresores por parte del IVSS”, alerta sobre la grave situación que viven los pacientes.
Amigos Trasplantados de Venezuela (ATV) es una organización sin fines de lucro fundada en 2001, cuenta con 15 capítulos en el país. Sus miembros son personas trasplantadas y defensores de sus derechos como pacientes.
Buscan así contribuir y brindar apoyo integral a quienes esperan o han recibido un trasplante de órgano, con el fin de mejorar y mantener la calidad de vida e integración activa y productiva a la sociedad.
Reimer Villamizar, director de Amigos Trasplantados de Venezuela, admitió que ya están llegando a un punto de emergencia. Detalló que los primeros meses de enero de 2023 hubo una escasez enorme de micofelonato mofetil, un medicamento inmunosupresor que evita el rechazo de órganos o injertos en pacientes que reciben trasplantes.
“Se logró restablecer la entrega de los medicamentos por parte del Seguro Social en marzo del 2023 y esto fue a nivel nacional. Amigos Trasplantados de Venezuela tenían un poquito de stock y se lograron cubrir muchas emergencias. ¿Qué pasa si un paciente no tiene sus medicamentos inmunosupresores? Bueno, sucede que comienzan a aparecer episodios de rechazo. ¿Qué pasa? Los medicamentos inmunosupresores lo que hacen es inhibir el sistema inmunológico para que el organismo como tal reconozca el órgano trasplantado como suyo”, sumó Villamizar.
Al no existir la medicación inmunosupresora, entonces el sistema inmunológico empieza a atacar aquello que es extraño, en este caso sería el injerto, el trasplante o el órgano trasplantado.
Escasez antes de las sanciones
Pero esta situación no es nueva. En 2017 hubo una crisis parecida a esta, lo que trajo como consecuencia muchos episodios de rechazo. “Estamos hablando de cerca de casi 100 episodios de rechazo en el 2017. Muchos de ellos se pudieron recuperar, otros tuvieron muchas complicaciones derivadas de estos episodios de rechazo, y rechazos como tal. Y esto, por supuesto, trajo algunas consecuencias en pérdida y fallecimiento de personas. En el 2019 hubo otra ocasión. Pero nada de esto es producto de sanciones, esto ya viene sucediendo en el trascurso del tiempo y de manera ya paulatina se viene acrecentando más”.
El director de la organización alertó que 2023 cerró con esta situación y en 2024 continuaron con estas fallas en la entrega de medicamentos.
“A finales de año, desde septiembre, ya se estaban haciendo las denuncias de un medicamento que se llama Tacrolimus. En septiembre, incluso, yo mismo te estoy diciendo, porque soy trasplantado, me encontré en la farmacia de alto costo de Los Ruices con la directora general de farmacias de alto costo del Seguro Social. Nosotros como organización la abordamos sobre la situación del Tacrolimus que ya se estaba presentando, que iba para su primer mes sin la entrega por parte de la farmacia de alto costo a los pacientes”, relató Villamizar.
Comentó que la funcionaria le dijo que informara a sus compañeros de que ya el medicamento estaba en el país y de que se entregaría, lo cual no ocurrió. “Estoy hablando del 28 de septiembre y ya estamos en enero del 2024”, precisó.
Pacientes trasplantados desatendidos
La organización especificó que iniciaron el año con esta emergencia y lo ven como una situación lamentable y alarmante en vista de que se han hecho unos cuantos trasplantes en la unidad que funciona en la clínica popular de El Paraíso (Caracas).
Pero la realidad es que muchos pacientes que están trasplantando viven con la angustia, la incertidumbre y el miedo, porque no consiguen el medicamento Tacrolimus.
“Al llegar diciembre, las farmacias internacionales, las pocas que pudiesen distribuir ese medicamento, la cierran en diciembre y algunas abren después del 15 de enero. Entonces algunos, quienes pudieron o tenían la oportunidad de comprar, pudieron hacerlo. En este momento la farmacia está vendiendo y hay que anotarse como en una lista para ver cuándo llega y van distribuyendo. Estoy hablando que un frasco lo están vendiendo cerca de 50 dólares. Estos son medicamentos que tienen que ser tomados de por vida. Entonces nos preocupa que no todas las personas puedan o tengan la capacidad económica para comprar este medicamento”, señaló Reimer Villamizar.
Cerca de unas 2.000 personas quienes están en trasplante o que cuentan con un trasplante en Venezuela, casi un 50 % debe tomar ese medicamento.
“Y hay otro medicamento que se llama Micofelonatomofetil que en algunas farmacias, están manifestando los compañeros sobre todo en el interior, de que ya está haciéndole falta también. Entonces se estarían sumando dos inmunosupresores, y es importante señalar que estos tratamientos son la combinación de varios inmunosupresores, no es uno solo, son dos o tres en algunos casos. Son primordiales para la sobrevida de un trasplante”, explicó Villamizar.